Si tienes la boca fatal, no busques excusas. Hay personas que dicen que quieren ir al ortodoncista o al dentista, pero que tienen la boca tan mal que les da vergüenza o miedo. Eso es una tontería. Los ortodoncistas somos médicos. Para nosotros no hay motivo de vergüenza, porque no abordamos ningún caso con un juicio de valor. Solo pensamos: “vale, este es el problema a solucionar y lo abordaremos así”.

Además, todos los años que llevamos de profesión nos ha hecho ver de todo, y eso nos ha retirado totalmente ese tipo de sensibilidad. Reunirte con nuestros ortodoncistas es reunirte con alguien que no te juzga, que está para ayudarte y para escucharte. Te preguntaremos por qué tienes así la boca, te enseñaremos buenas prácticas para que no vuelva a suceder y repararemos cualquier maloclusión que tengas.

En caso de que tengas que pasar primero por el dentista antes de ponerte una ortodoncia, te derivaremos a uno de total confianza que tampoco te juzgará. Te eliminará el sarro, te sellará las caries y te preparará para la ortodoncia. Y una vez que el tratamiento de ortodoncia esté resuelto, podremos programar blanqueamientos. Es decir, que acabarás con una boca perfecta y una sonrisa que te encantará tener y de la que presumirás.

No tengas vergüenza. En nuestra clínica de ortodoncia volverás a sonreír

Porque piensa: ¿prefieres que te dé vergüenza sonreír en las fotos o enseñarle tu caso al ortodoncista? Si vives en A Coruña o en Galicia, pide cita con nuestra clínica de ortodoncia. En González Dans llevamos 30 años cuidando la boca de grandes y pequeños en la ciudad. Vienen a visitarnos personas de Lugo, de Ferrol, Ourense y también de Madrid. El motivo es que no solo somos ortodoncistas, también investigadores, y eso hace que estemos a la vanguardia de  los tratamientos de ortodoncia invisibles.

Visítanos para volver a sonreír, sin ninguna vergüenza.