Una ortodoncia mal hecha, con un mal diagnóstico, un mal seguimiento o un proceso de refinamiento poco cuidado, puede tener unas consecuencias desastrosas para tu imagen y para la salud de tu boca. Es bastante fácil identificar a los profesionales que puede que no desarrollen su trabajo con Invisalign o con los brackets como deberían: si ves una oferta que parece demasiado buena, no lo es.
El motivo es que cuando se rebaja el precio de algo se hace a costa de algo. Si se reducen los costes de una ortodoncia es porque el profesional que te la va a poner todavía no ha desarrollado la experiencia suficiente o porque el tiempo que te dedicará será menor. Internet está lleno de esta casuística desde que Invisalign y los brackets han sido víctimas del marketing.
Algunas de las consecuencias de una ortodoncia mal hecha son: no tener la imagen que deseas, la sensación de debilidad en los dientes, que las piezas dentales no se queden dónde deberían o que alguno de los dientes no está exactamente en su sitio correcto. Esto puede derivar en futuros problemas dentales que tendrán que ser corregidos por otro ortodoncista, lo que acabará haciendo que aquella oferta que escogiste para abaratar tu tratamiento acabé convirtiéndose en algo muy caro.
Las consecuencias de una ortodoncia mal hecha pueden ser desastrosas
La única manera de evitar todas estas consecuencias de una ortodoncia mal hecha es confiar en profesionales. En nuestra clínica de ortodoncia en A Coruña tenemos la experiencia y confiamos en la mejor arma para darte siempre los mejores resultados: la formación continua. El uso de Invisalign y brackets nos obliga a estar permanentemente aprendiendo, porque solo así conseguimos darte la sonrisa que necesitas. Estamos en A Coruña pero recibimos pacientes de toda Galicia. Gracias por elegirnos.